Descripción
Hay un poco de lío con santo Tomás apóstol. Se desconoce su verdadero nombre y lo que ha llegado hasta nosotros es el termino tautológico con el que se le nombraba, Tomás, que significa gemelo pero no se sabe de quién. Los sirios lo nombran como Judas aunque la tradición cristiana lo descarta. Lo más interesante a destacar es la hipótesis defendida por Carlos de Sigüenza y Góngora de que Santo Tomás estuvo en América evangelizando desalmados y su figura permaneció en el ideario prehispánico como el mismísimo Quetzalcóatl, llegando incluso a conjeturarse que el manto de la virgen de Guadalupe era en realidad la capa de Santo Tomás Quetzalcóatl. Adopté el rol de Santo Tomás en este apostolado sin apenas pensarlo, por mi inclinación natural a la duda, la prestidigitación y la farsa. Porque la otra tautología que se ha impuesto es la de Tomás el incrédulo y su imagen más reconocible, introduciendo de forma pornográfica, los dedos por su herida, en el cuerpo de Cristo. Es exactamente lo que habría hecho yo.